Este año, según datos brindados por el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), se espera una muy buena cosecha, comparada a la del año pasado. El organismo indicó que para la provincia de Mendoza se espera una producción de 17, 9 millones de quintales, lo que representa un crecimiento del 25% con respecto a 2009. En San Juan se estima una producción de 7 millones de quintales, lo que significa un incremento del 17% con respecto a la Vendimia 2009.
De esta manera, las altas temperaturas registradas en todo el país, que en ocasiones tocó picos de 40º parece no haber afectado la sanidad de los viñedos. Este clima puede provocar quemadura de la piel, y de esta manera las plantas sufren deshidratación extrema, ya que pueden secarse sus hojas.
Consultado sobre el tema, el ingeniero Alberto Bustos del área de viticultura de la EEA INTA Mendoza, explicó que por el momento ellos no han recibido consultas sobre malos estados de la vid, así como tampoco de enfermedades. “No creemos que el calor afecte este año la sanidad de los viñedos. Sólo algunas zonas se han visto afectadas, principalmente en San Martín y norte de la provincia de Mendoza”.
El experto del INTA agregó que “estos no han tenido los riegos indicados y necesarios para las temperaturas que hicieron en la provincia. En este sentido, si el productor ha cuidado debidamente su tierra, y ha tenido disponibilidad de agua, la realidad es muy positiva”.
Con respecto al agua, Bustos mencionó que en algunas zonas de Mendoza hubo escasez, y estos productores no contaban con refuerzos de pozos, por lo que la fruta se les deshidrató lo que afectará el peso del grano una vez que se coseche. Sin embargo, aclaró que son casos bastantes aislados, ya que la mayoría tomó las medidas necesarias, aumentando la frecuencia de riego.
Finalmente, remarcó que lo que puede suceder, si continúan estas temperaturas, es que se adelante la cosecha algunos días, según el azúcar de las uvas. “Hay zonas, como Lavalle, San Juan, y en el norte del país, como Salta, que ya están levantando algunas variedades tempranas, como es el caso del Chardonnay, Sultanina y algunas mesa, como por ejemplo, Red Globe”.
Pablo Minatelli, gerente de viñedos de Norton, comentó que las plantas que se habían visto afectadas durante el 2008 – 2009 a causa del granizo y la Peronóspora, hoy ya está recuperadas.
En tanto, el técnico sostuvo quehan notado en alugnos viñedos, en cuarteles particulares, el corrimiento de algunas variedades a causa de los fríos primaverales que se registraron y afectaron su normal desarrollo durante ese momento.
A pesar de esto, Minatelli remarcó que “hasta el momento, creemos que vamos a tener una vendimia superior a la del año pasado, con un incremento en la producción. Esto fundamentalmente lo atribuyo a la recuperación de viñedos que fueron afectados por accidentes climáticos (heladas y granizo), y al cuidado de los productores con las plantas, regando adecuadamente y a conciencia”.
Por su parte, Walter Bressia, enólogo y propietario de la bodega que lleva su apellido, destacó que “todavía nos encontramos dentro de los parámetros normales del verano en Mendoza. No hay porque preocuparse, el 30 de enero del 2003 hubo una máxima de 44º, y esa fue una de las cosechas más reconocidas que hemos tenido en los últimos años”. Y continúo diciendo, que mientras los enólogos y productores caminen la viña no van a tener severos inconvenientes.
En coincidencia con sus colegas, el ingeniero Ricardo González Villanueva, de la bodega Escorihuela, remarcó que “hasta el momento hay una excelente sanidad en los viñedos, y lo que se está viendo, por ahora son algunos síntomas de estrés en las uvas, en contados casos”.
FUENTE: Laura Saieg - lsaieg@areadelvino.com